Sesión de fotos de familia: recuerdos emocionales a través de generaciones

Las fotos de familia son uno de nuestros recuerdos más preciados. Incluso después de años, las grabaciones se recuperan repetidamente y se transmiten a las generaciones siguientes. Las fotos de familia no sólo son muy divertidas, sino que también documentan la crónica de una familia. Pero no siempre es fácil combinar al abuelo y al nieto más pequeño en una sola foto. Con los siguientes consejos de preparación, la sesión de fotos de familia también es un éxito.

Haga las preparaciones correctas

Sólo toma unas cuantas fotos familiares rápidas, no puede tomar tanto tiempo. Si piensas así, cometes el primer error. Las fotos familiares no están disponibles con sólo pulsar un botón, llevan tiempo, a veces incluso mucho tiempo. Pero no es necesario ser un fotógrafo profesional para obtener algunas fotos decentes. Piensa en quién va a salir en la foto primero. A continuación, decida dónde debe tomarse la foto: en casa, en el salón o en el jardín, en una celebración familiar o frente a un escenario histórico, etc. ¿Cómo deben vestirse los miembros de la familia? Es la ocasión festiva o se deben probar diferentes trajes. Después de aclarar el quién y el dónde, llegamos a la determinación de la fecha de rodaje. Esto a menudo no es fácil porque no todos los miembros de la familia están disponibles al mismo tiempo. La información meteorológica fiable es muy importante si las fotos se van a tomar en el exterior. Nadie posa voluntariamente bajo la lluvia. Si la luz disponible no es suficiente, debe ser complementada con lámparas o una unidad de flash.

¿Abuelos, padres, hijos, todos están aquí? – Entonces puede empezar

Para un rodaje clásico hay que calcular entre una y dos horas. Utilice siempre un trípode y conecte la cámara a su portátil, vale la pena probar algunos motivos de antemano. Muéstrale a la familia tus mejores fotos, eso crea confianza en tus habilidades. Tenga en cuenta que muchas personas están de pie frente a una cámara por primera vez. Trate de crear una atmósfera relajada con dulces para los niños y refrescos para los adultos. Los niños pequeños en particular no pueden permanecer quietos durante largos periodos de tiempo, por lo que siempre pueden llevar su juguete favorito con ellos y no tienen que mirar a la cámara. No esperes que los adultos se interesen por las fotos, algunas personas se ponen nerviosas cuando se les apunta con una cámara. Un bebé suele empezar a gritar en el momento equivocado.

Imágenes de generaciones cruzadas dicen más de 1000 palabras

Desde el abuelo hasta las tías y los bebés, los diferentes sexos y generaciones pueden ser representados en una sesión de fotos de familia. Si es posible, cada persona debe determinar la posición en la imagen por sí misma, las poses forzadas a menudo parecen antinaturales. Un buen fotógrafo siempre encuentra posibilidades para un arreglo creativo de las personas individuales. Asegúrate de que las personas más grandes no proyecten sus sombras sobre los demás. Si utiliza un rayo, colóquelo frente al grupo. Toma fotos desde diferentes ángulos. Evite las sonrisas torturadas y preste especial atención a los niños. Lo mejor para todos es lucir relajados, aunque esto sea muy difícil de lograr. No todo el mundo tiene que sonreír en la foto, pero las buenas fotos familiares irradian amor y cordialidad. Asegúrate de que todos los ojos estén abiertos. Ajuste la cámara al modo de disparo continuo.

Por cierto: Si la familia ya está unida una vez, también surge la oportunidad de hacer retratos individuales.

Resultado: Los dulces pueden causar maravillas fotográficas reales

Una sesión de fotos familiar no es tan fácil como algunos podrían pensar. Pero después de una buena preparación puedes ir tranquilamente a tu trabajo. Hable con los miembros de la familia y quíteles el nerviosismo. Manténgase creativo, preste atención a los momentos sorprendentes y apriete el gatillo en el momento adecuado.